El conseller de Acción Climática de la Generalitat, David Mascort, ha afirmado que aún “no es hora de declarar la emergencia” en el sistema Ter-Llobregat, principal fuente de suministro de agua para Barcelona y su área metropolitana, a pesar de que se encuentra al 16.4% de su capacidad.
Mascort argumenta que la sequía en Catalunya se gestiona de manera precisa y que la declaración de emergencia se evalúa de forma individual en cada unidad de explotación.
Sin embargo, la preocupación aumenta, ya que los embalses de las cuencas internas catalanas registran un nivel del 15.99%, situándose por primera vez por debajo del umbral crítico del 16% establecido para la declaración de emergencia por sequía, según datos de este jueves.
La situación plantea interrogantes sobre la sostenibilidad a largo plazo del suministro de agua en la región, generando llamados a la acción y medidas preventivas por parte de la comunidad y expertos en gestión hídrica.
Las autoridades están siendo presionadas para implementar estrategias inmediatas que mitiguen el impacto de la sequía y garanticen la seguridad hídrica en el futuro, mientras la sociedad sigue de cerca la evolución de esta crisis ambiental.
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