El Consejo de Ministros ha dado luz verde este martes al anteproyecto de Ley de Administración Abierta, una medida que busca promover la transparencia, la rendición de cuentas y la participación ciudadana de la Administración General del Estado. Entre algunas medidas, incluye la obligación de publicar las agendas institucionales y los viajes de todos los altos cargos públicos, así como la regulación de un régimen de infracciones que permitirá imponer sanciones a los cargos que incumplan cuestiones de transparencia.
Así lo ha anunciado el ministro para la Transformación Digital y la Función Pública, Óscar López, en una rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de este martes. La medida, según López, “demuestra el compromiso de este Gobierno con la democracia y la transparencia” y forma parte del Plan de Acción por la Democracia y el Plan Estatal de Lucha contra la Corrupción, dos iniciativas impulsadas por el Ejecutivo hace meses.
“Debemos tomar medidas ambiciosas y ejemplares en materia de transparencia, integridad, rendición de cuentas, participación ciudadana y apertura institucional. Porque ganar confianza es ganar democracia”, ha hecho hincapié López. Con todo, la modificación normativa pretende “cumplir con los estándares europeos” y lograr que los ciudadanos “tengan más fácil reclamar frente a la administración cuando se vean lesionados en sus derechos”.
La nueva norma, que se prevé enviar al Congreso de los Diputados, se divide en tres bloques sobre la transparencia, la participación y los conflictos de intereses. Como ha indicado López, se ha elaborado bajo las recomendaciones de la Comisión Europea, el Grupo de Estados contra la Corrupción (Greco), la OCDE y la sociedad civil.
Más información sobre los asesores que trabajen para el Gobierno
El titular de Transformación Digital ha enumerado algunas de las novedades que contiene la norma. Será obligatorio publicar las agendas institucionales y los viajes de altos cargos —hasta el nivel de subdirector general—, y se reformará el Portal de Transparencia, donde se incluirá más información y se añadirá a los asesores que trabajen para el Gobierno. “Cualquier ciudadano podrá consultar de forma sencilla las agendas, viajes y cuentas públicas”, ha comentado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde Vitoria, donde ha inaugurado la IX Cumbre Global de Gobierno Abierto, en la que participan más de 2.000 representantes de decenas de países.
Asimismo, se aplicará un régimen para detectar y prevenir conflictos que se aplicará también al personal eventual, y se va a incluir una presentación de bienes y actividades con el fin de ver si ha habido alguna variación destacada al finalizar la legislatura.
Todo esto, como ha matizado el presidente del Gobierno, transformará la plataforma de contratación del sector público implementando la inteligencia artificial y con el fin de detectar fraudes. “La contratación pública tiene que tener vigilancia”, ha señalado Sánchez.
Además, el Consejo de Transparencia y Buen Gobierno tendrá la capacidad de sancionar con multas a quienes incumplan la obligación de transparencia, algo que hasta ahora no podía hacer. Estas multas “coercitivas” podrán ir de 600 a 1.000 euros.
“Auditorías ciudadanas” para evaluar las actuaciones públicas
El ministro también ha adelantado que, de forma coordinada con el Ministerio de Hacienda, se van a establecer “auditorías ciudadanas” en los procesos de contratación de la Administración General del Estado, con el fin de evaluar las actuaciones y políticas del sector público estatal.
Por otro lado, López ha adelantado que se amplían las obligaciones de la huella normativa —que es el registro público de la creación y tramitación de una norma— para cualquier regulación que apruebe el Estado. Otra novedad es que se va a dar la posibilidad de que las empresas que concurran a licitación pública podrán ser obligadas a firmar un pacto de integridad.
En general, López ha puesto en valor la democracia española y ha señalado que, ante la amenaza de “un caballo de troya ultraderechista” que busca “socavar los cimientos de la democracia, la mejor receta es más democracia, más transparencia y más ejemplaridad”.