La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado este miércoles una alerta roja en la Depresión Central de Barcelona ante la previsión de lluvias torrenciales y tormentas severas. Las precipitaciones podrían alcanzar los 60 litros por metro cuadrado en apenas una hora, con acumulaciones que llegarían a 120 mm en menos de cuatro horas, cifras capaces de provocar inundaciones súbitas en zonas urbanas y rurales. La alerta estará vigente hasta la medianoche, el periodo de mayor riesgo.
El resto de la provincia de Barcelona cuenta con varios avisos naranja, incluyendo el prepirineo, el prelitoral y el litoral. Las lluvias podrían superar los 120 litros en 12 horas, con tormentas que traerán granizo de gran tamaño y fuertes descargas eléctricas. También se ha activado el aviso naranja en el Pirineo y prelitoral de Girona, así como en el prelitoral y litoral norte y sur de Tarragona, donde se esperan precipitaciones de hasta 40-60 mm en una hora, con acumulaciones de 80 mm en 12 horas en algunos puntos.
Avisos amarillos en Lleida por lluvias
El riesgo es algo menor en Lleida, aunque se mantienen avisos amarillos por lluvias de hasta 25 mm en una hora en el Pirineo, el Valle de Arán y la Depresión Central, acompañadas de tormentas con granizo. En el Ampurdán (Girona), además de las lluvias, se prevé un episodio de viento intenso del norte y noroeste, con rachas que podrían superar los 50-60 km/h y un oleaje que alcanzará los tres metros en la madrugada.
Las precipitaciones más intensas se concentrarán en la franja entre el mediodía y la tarde, momento en el que se espera la mayor actividad tormentosa. La AEMET no descarta que se produzcan trombas de agua, desbordamientos de rieras y problemas en la red viaria y ferroviaria, especialmente en áreas metropolitanas y zonas costeras.
Protección Civil ha activado el Plan INUNCAT en fase de alerta y ha pedido a la ciudadanía que evite desplazamientos innecesarios, no cruce vías inundadas ni conduzca en carreteras con balsas de agua. También recomienda retirar objetos que puedan ser arrastrados por el agua y mantenerse informado a través de los canales oficiales. Los servicios de emergencias están en prealerta ante posibles incidencias graves.