El sector turístico confirmó este verano el frenazo de su actividad con un crecimiento de apenas un 2,8%, por debajo del avance del 3,3% registrado en un segundo trimestre del año que ya mostró síntomas de desaceleración. “El turismo ha dejado de ser el gran dinamizador de la economía española”, ha reconocido este martes el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, Óscar Perelli, en la presentación del último informe trimestral de la organización empresarial, que ha revisado a la baja sus perspectivas de crecimiento del sector para 2025 y ha advertido del inicio de una nueva etapa de “normalización”.
“Hemos cerrado un verano en el que el turismo ha ralentizado su dinamismo”, ha confirmado Perelli, que ha apuntado a que el enfriamiento de la actividad se ha traducido también en una desaceleración de las ventas. Han crecido un 2,8% frente al avance del 4,5% observado el año pasado. En esa misma línea, también el empleo turístico se ha resentido, con aumento en el número de trabajadores de apenas un 2,1%, por debajo del 2,7% del conjunto de la economía española.
Aunque con una evolución más moderada, sigue siendo el turismo extranjero lo que sustenta el avance del sector, dado que la demanda nacional se encuentra estancada. Exceltur llama especialmente la atención sobre el aumento del gasto turístico, que creció con más fuerza que la afluencia y dejó un desembolso total un 5,6% por encima del de 2024. En cambio, el número de visitantes internacionales se incrementó este verano un 2,3% con respecto al año pasado y las pernoctaciones, apenas un 0,5%. España aquejó el enfriamiento de mercados europeos tradicionales como el alemán, el francés, el italiano o el belga, algo que se compensó en parte con el dinamismo en la llegada de ingleses, irlandeses, polacos y portugueses, así como de viajeros asiáticos y latinoamericanos.
Desde Exceltur esperan que la ralentización del sector continúe en los próximos meses. “En el cuarto trimestre daremos un paso más en la normalización del sector”, ha adelantado Perelli, estimando para la recta final de 2025 una nueva moderación al 2% en el ritmo de crecimiento de las ventas, lo que ha obligado a corregir la previsión para el conjunto del año. La organización empresarial pronostica ahora un avance del PIB turístico del 2,8%, frente al 3,3% esperado inicialmente.
Pese a la revisión a la baja de las previsiones, la organización empresarial matiza que se espera un crecimiento en línea con el proyectado para la economía española en su conjunto, aunque reconoce que el sector ha perdido fuerza como motor económico. “El sector turístico, que había ejercido de gran dinamizador de la economía española, no lo va a seguir siendo, sino que se va a mover en los niveles medios de la economía”, ha expresado Perelli, que ha señaldo que esta rama de actividad pasará de haber explicado el 52,6% del crecimiento del PIB nacional entre 2021 y 2024 a explicar en torno al 13% este año.
Una nueva etapa
“Esto significa abrir una etapa de normalización”, ha valorado el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, que ha asegurado que la ralentización del sector “no es preocupante” mientras siga generando valor añadido. “De crecimientos por encima del 10% el año pasado, hemos pasado a un crecimiento del 2,8%. Estábamos creciendo de manera muy fuerte y ahora entramos en una etapa de normalización en la que estamos creciendo a los ritmos propios de los condicionantes macroeconómicos”, ha insistido, apuntando a que este punto de inflexión “debe entenderse como un acicate para impulsar con más vigor los retos del sector”.
En ese sentido, la organización empresarial llama a trabajar de forma conjunta junto al sector público en estrategias y acciones que mejoren la contribución del turismo a la economía y a la sociedad. Entre los aspectos que consideran prioritario abordar está, además de la puesta en marcha de la Estrategia Turismo Sostenible España 2030 anunciada por el Gobierno, la regeneración de los destinos tradicionales de sol y playa y la persecución de la oferta ilegal de pisos turísticos, para lo que creen necesario una mayor responsabilidad de las plataformas comercializadoras y una diferenciación clara en la normativa estatal de los alquileres de temporada y los alquileres turísticos.
En ese sentido, la organización empresarial llama a trabajar de forma conjunta junto al sector público en estrategias y acciones que mejoren la contribución del turismo a la economía y a la sociedad. Entre los aspectos que consideran prioritario abordar está, además de la puesta en marcha de la Estrategia Turismo Sostenible España 2030 anunciada por el Gobierno, la regeneración de los destinos tradicionales de sol y playa y la persecución de la oferta ilegal de pisos turísticos, para lo que creen necesario una mayor responsabilidad de las plataformas comercializadoras y una diferenciación clara en la normativa estatal de los alquileres de temporada y los alquileres turísticos.