Los accionistas de Banco Sabadell tienen hasta la medianoche de este viernes para decidir si venden sus acciones a BBVA en la oferta pública de adquisición (opa) que la entidad lanzó hace ya 17 meses y que podría dilatarse aún más en el tiempo en caso de que el porcentaje de aceptación se sitúe entre el 30% y el 50%.
Ninguna de las dos partes contempla (al menos públicamente) este escenario. Desde BBVA se muestran “plenamente convencidos” del éxito de la operación al contar con el apoyo de los inversores institucionales y de buena parte de los minoristas, ha señalado el presidente de la entidad, Carlos Torres, en una entrevista en Las Mañanas de RNE.
Enfrente, el Sabadell cree que serán precisamente los minoristas los que decanten la balanza a su favor. Este grupo de accionistas representa un 40% del capital y, de ellos, el 80% son clientes del banco catalán, “y esos están gritando que no lo quieren”, ha recalcado el consejero delegado del Banco Sabadell, César González-Bueno, en una entrevista en Cafè d’idees de TVE.
Por el momento, el consejero David Martínez —el mayor accionista a título individual con un 3,86% de las acciones— ya ha dicho que aceptará el canje. Mientras que otros con mayor peso, como la aseguradora Zurich —segundo inversor y socio estratégico de la entidad— ha confirmado que no acudirá a la opa con su participación del 5%.
Tres escenarios y muchas incógnitas
El resultado se conocerá el próximo 17 de octubre, fecha en la que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) prevé anunciar el porcentaje de capital del Sabadell que ha aceptado el intercambio de sus acciones por títulos del BBVA.
Si queda por debajo del 30%, la opa fracasaría y el Banco Sabadell mantendría su independencia. En cambio, si la aceptación supera el 50%, la opa sería un éxito para el BBVA, que se haría con el control de la entidad catalana.
Las dudas surgen con el tercer escenario, esto es, si la aceptación se queda entre el 30% y el 50%, la horquilla que muchos analistas ven como más probable. En este caso, el BBVA podría renunciar al umbral mínimo del 50% y lanzar una segunda opa por el resto de acciones, en efectivo y con un precio que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) considere como equitativo.
Torres ha dejado claro que el lanzamiento de una segunda opa es una “posibilidad, pero no una obligación” para ellos, pues el éxito de la oferta estaba condicionado precisamente a obtener ese 50%. Y ha advertido de que, si deciden renunciar a ese umbral mínimo y lanzar una segunda operación, “nunca sería a un precio distinto de la primera”.
Torres (BBVA): “No tiene ninguna ventaja esperar”
Por ello, ha animado a los accionistas de Sabadell a vender sus acciones en este momento. “Ahora tenemos un tren que está pasando, un tren en marcha, yo animo a todos a que se suban porque, si no lo hacen, puede que no haya otro”, ha advertido Torres en los micrófonos de RNE.
En su opinión, “no tiene ninguna ventaja esperar” a una hipotética segunda opa y ha lanzado un mensaje a los partidarios de no vender: “Si no hacen nada, pierden la oportunidad en una operación que es histórica y se quedarían como accionistas minoritarios de un Banco Sabadell en el que habría menos liquidez en Bolsa, debido a que BBVA habría comprado la mayoría de las acciones y eso tiene implicaciones negativas sobre el valor”,.
Ante la finalización este viernes a medianoche del plazo para aceptar la oferta, BBVA mantendrá abiertas unas 60 oficinas hasta las 21.00 horas de este viernes, informa Europea Press. Asimismo, Torres ha asegurado que la entidad ha habilitado un teléfono hasta medianoche, ya que también se pueden presentar las aceptaciones por otros medios.
González-Bueno (Sabadell): “La segunda oferta sería más atractiva”
Desde Banco Sabadell, por su parte, se han mostrado convencidos de que esa eventual segunda oferta sería “muchísimo más atractiva” para los accionistas, aunque el proceso se dilataría al menos otros cuatro o cinco meses, ha dicho González-Bueno en Cafè d’idees, a la espera de obtener de nuevo la mayoría de aprobaciones regulatorias.
Durante ese tiempo, ha explicado el consejero delegado, los accionistas de Sabadell que decidan no vender tendrían sobre la mesa una oferta “a un precio fijo”, que determinará la CNMV y que “no puede bajar”, lo que les protegería de los vaivenes del mercado.
“Si suben esas acciones, te las quedas porque valen más. Pero si hay una corrección evidentemente acudirán todos en masa y esto provocará muchísima tensión en la acción del BBVA de aquellos que hubiesen ido al primer canje y los accionistas del BBVA”, ha alertado.
Por eso, González-Bueno cree que “es una decisión muy difícil” para la entidad vasca. “Si no llegan al 30%, pues no pasa nada, cada uno se va para su casa y se devuelven las acciones. Pero si se quedan entre el 30% y el 50%, es una decisión muy difícil porque pueden, entre otras cosas, poner en riesgo la propia cotización de BBVA”, ha sentenciado.
Bruselas amenaza con más expedientes
En otro orden de cosas, la Comisión Europea ha advertido este viernes de que expedientará a todos aquellos gobiernos que pongan trabas a las operaciones de integración del mercado comunitario de servicios financieros, informa Europa Press, después de la intervención del Ejecutivo italiano para obstaculizar la fusión entre UniCredit y BPM.
Cabe recordar que Bruselas ya expedientó a España en el mes de julio por los poderes discrecionales que varias normas en la legislación española otorgan al Gobierno para poder frenar operaciones como la OPA de BBVA a Sabadell, al considerar que su alcance permite actuar más allá del interés general, a lo que España debe responder antes del 26 de octubre.