La Fiscalía de Tarragona ha iniciado nuevas diligencias para investigar los persistentes vertidos de pellets que afectan las playas de la provincia catalana.
A pesar de intentos anteriores, la falta de identificación de los responsables condujo al archivo de casos previos.
Esta vez, el Fiscal de la Sala de Medio Ambiente, Antonio Vercher, impulsó la acción, coincidiendo con un reciente vertido en la costa gallega.
La Generalitat ha respondido abriendo un expediente contra ocho empresas químicas locales, sospechosas de estar vinculadas a los microplásticos que afectan las playas desde hace al menos cinco años.
Las empresas señaladas han presentado alegaciones durante el proceso de audiencia, y se anticipa que el expediente podría ampliarse con la inclusión de otras compañías.
En paralelo, voluntarios se movilizan para limpiar la playa de La Pineda, en Vila-seca (Tarragona), una de las más afectadas por los vertidos de pellets.
Según grupos ecologistas, esta playa se encuentra entre las más perjudicadas por microplásticos a nivel mundial, acentuando la urgencia de la investigación en curso.
Las autoridades catalanas han tomado medidas decisivas en esta ocasión, destacando un cambio en la actitud frente a la problemática medioambiental, mientras la sociedad y grupos ecologistas continúan esforzándose por mitigar los impactos en las costas catalanas.
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