A un mes de la fecha límite para la investidura en España, las conversaciones entre el PSOE y diversos grupos políticos continúan avanzando, según informó un ministro del partido gobernante.
Sin embargo, el mayor desafío se presenta en las negociaciones con Junts, la formación independentista catalana, que exige la promulgación de una ley de amnistía y la aceptación de la ‘vía escocesa’ para un referéndum.
Aunque estas demandas han generado cierta desconfianza, los socialistas mantienen abiertas las conversaciones con otras fuerzas políticas, como Sumar, ERC, PNV, BNG y EH Bildu.
El punto más álgido de las negociaciones recae en la petición de Junts de que la ley de amnistía sea registrada en el Congreso antes de la votación de investidura, lo cual es considerado crucial para garantizar su apoyo.
Además, buscan que la amnistía beneficie a alrededor de 4,000 encausados relacionados con el proceso independentista.
Esta solicitud representa una rebaja de las condiciones iniciales de Junts, que exigía la aprobación de la ley antes de la investidura.
Además, Junts ha pedido otros gestos, como el cambio en el reglamento del Congreso para el uso de las lenguas cooficiales y el impulso del catalán como idioma oficial de la Unión Europea.
Otro aspecto importante en las negociaciones es la propuesta de la ‘vía escocesa’ para el referéndum, que los independentistas han decidido respaldar.
Este enfoque plantea la posibilidad de un referéndum pactado, en contraposición a la unilateralidad. No obstante, esta opción es vista como un intento de dar legitimidad al referéndum ilegal celebrado en Cataluña en 2017.
Las conversaciones continúan en medio de la incertidumbre sobre el resultado de la investidura y la posibilidad de elecciones anticipadas si no se llega a un acuerdo en el próximo mes.
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