España, que solía destacarse por tener una de las inflaciones alimentarias más bajas en la eurozona, ha caído al cuarto lugar en apenas cinco meses debido a un aumento abrupto en los precios.
En abril, la cesta de la compra española era un 12.9% más cara que en el mismo mes del año anterior, pero en septiembre, la inflación de los alimentos apenas se había reducido al 10.5%, mientras que otros países de la eurozona mostraban tasas más bajas.
La crisis del aceite de oliva, con un aumento del 31.4% en cinco meses, y el incremento del 10.3% en el precio de la fruta son los principales factores detrás de este cambio.
Estos aumentos han contrarrestado las bajadas en los precios de verduras y productos lácteos, alterando la estructura de la inflación alimentaria en España y generando preocupación entre los economistas sobre las causas subyacentes de este fenómeno.
You must be logged in to post a comment Login